La cocina es el espacio ideal para satisfacer el arte del buen comer. El gusto por lograr el placer del paladar necesita de un ambiente armónico con buena estética. Cuidar el diseño de ese lugar, permitirá que la elaboración de los alimentos junto a su conservación y ubicación geográfica, mantenga un orden lineal de gran atractivo visual.
Contar con una extensión, o en la mayoría de los casos, con una superficie en el centro en el diseño interior de la cocina, permitirá ciertos beneficios. Primero, aumentar la funcionalidad y la eficiencia en el aprovechamiento del espacio y segundo, como ancla visual de inversión sólida. Recomendables en cocinas con forma de U o de L, las islas de cocina son ideales para esto pues funcionan para diferentes propósitos; son elementos prácticos que brindan toques contemporáneos al diseño que deseamos implementar, sirven como extensiones de almacenamiento o como mesas centrales para comer, son accesibles desde todos los ángulos de la cocina y no representan un obstáculo para quienes se desplazan a través de ella. El objetivo está en hacer de cada rincón un espacio funcional, por esta razón en la mayoría de cocinas que poseen una isla, se pueden observar mesas auxiliares, encimeras multifunciones, entre otros.
Entonces, para aprovechar la capacidad de esta zona, las islas debe contar con un espacio suficiente en el centro de la cocina para añadir posteriormente asientos o muebles adicionales, en este caso, se recomiendan cocinas amplias, mayores a los veinte metros cuadrados (20m2). Es así como antes de colocar una isla personalizada o prefabricada, es necesario pensar en un tipo de diseño que responda a preguntas como; cuáles son las características definitivas de la cocina, cuántos metros ocupará la isla y qué elementos se agregaran a esta. De esta forma, con dicho plan estratégico, se optimizará al máximo el espacio sin crear un espacio reducido o agobiante.
¿Cómo aprovechar el espacio de la cocina?
Existen miles de maneras de abordar estos planteamientos, considerando que las islas ocupan una cantidad significativa del espacio. Una buena manera de convertir una cocina en un área de trabajo eficaz es jugar con los aspectos estéticos como la luminosidad o iluminación y con electrodomésticos multifuncionales como microondas con hornos incorporados, entre otros, que puede ser una opción que permita agrandar o ampliar visualmente el espacio. Cuanta más luz natural o artificial se tenga en este espacio, más se agrandara el espacio.
En planos abiertos, es ideal emplear islas perimetrales, cuyo tamaño y forma determina indudablemente el diseño de la habitación; dejar libre un espacio de al menos treinta y seis a cuarenta y ocho pulgadas, entre el perímetro de la isla y los gabinetes aledaños, permite ganar metros físicos y visuales suficientes para que las personas se muevan libremente entre estos pequeños caminos. También, seleccionar elementos de diseño que combinen entre sí, ayudara a crear ciertas características de mejor funcionalidad en sentido y apariencia. Por sobre todas las cosas, todos estos elementos juntos terminaran brindando la sensación de amplitud que necesitamos para aumentar la capacidad de la cocina.
Por sus materiales:
Las islas de acero o aluminio, son parte de las nuevas tendencias que dan a la cocina un aspecto profesional, siendo de gran durabilidad y fáciles de mantener, generan ese toque frio metalizado de “industria” o de alta cocina y combinados con electrodomésticos de acero inoxidable son perfectos para crear estilos minimalistas.
Las islas de madera crean un ambiente robusto ideales para el diseño clásico y rustico que permite experimentar con distintas formas y molduras. Aunque a pesar de considerar a la madera como un material resistente es importante tener cuidado con la humedad de los líquidos y los vapores que se generan continuamente en este apartado. En cuando a sus tipos. las tendencias van hacia la antracita y el roble por generar alto contraste con todos los tonos cromáticos, neutros, naturales, oscuros y claros. El contra de este material, es que en el mercado suelen conseguirse a precios elevados, pero si te gusta lo tradicional, este gasto valdrá la pena.
También existen islas de cocina de melanina y formica con laminados de alta densidad que destacan por sus ventajas, siendo la opción más económica y de amplia durabilidad. Entre ellos existen algunos con acabados de mate y satinados. Los colores empleados con este tipo de material en las cocinas, son extravagantes como el rojo o el anaranjado, pero también vienen en colores neutros como el blanco o el negro. En diseño estos generalmente son sencillos, de corte recto y van perfecto en las cocinas modernas.
Por sus diseños:
En la era moderna, los diseños de estas islas en las cocinas varían en cantidad, por ejemplo; para lograr un estilo de diseño de interiores más minimalista se utilizan islas con formas rectas que aprovechen el espacio, complementadas con colores claros, añadidos de madera con tonos oscuros.
Cabe destacar que estos estilos abundan en la actualidad.
En otros casos, fuera de ese minimalismo, muchos diseñadores y arquitectos juegan con el movimiento y dinamismo de las líneas curvas para mejorar la distribución de los elementos en la cocina. De acuerdo al gusto y al presupuesto, se pueden emplear islas cuadradas, circulares, ovaladas, de doble tablero, de granito, de mármol, de madera, de acero, entre otras.
En líneas generales, el diseño de la cocina debe estar muy bien pensado para brindar cierta organización y en el área de cocción y preparación de alimentos, ser muy higiénico, considerando que las funciones que allí se realizan como la actividad culinaria, el comer o tomar bebidas, es parte de nuestro confort. Así que luego de la implementación de estas islas, no olvides cuidar los detalles como recoger y secar la vajilla y poner cada cosa en su lugar.