Cuando pensamos en ‘casa japonesa’ nos pueden llegar a la cabeza dos conceptos: un apartamento minimalista y moderno, o una casa de madera de espacios amplios y jardines privados. Pero ambas viviendas son funcionales, y comparten el orden, perfección y pulcritud que tanto caracteriza a los japoneses en todo lo que realizan. Veremos los dos aspectos que caracterizan un hogar japonés; los espacios que lo componen, y el estilo.
Espacios
Para poder entender un hogar en Japón debemos tener presente que no funcionan como los hogares occidentales. Estamos acostumbrados a tener espacios designados como la sala, comedor y habitaciones, lugares que siempre tienen el mismo uso y actividades. Eso no ocurre siempre en las casas niponas; sólo la entrada, cocina y baños son inamovibles, pero cualquier lugar puede ser una sala de estar, un dormitorio o un comedor.
Aunque los espacios pueden variar, evidentemente hay lugares que comparten todas las casas japonesas. Antes del recibidor, el primer pequeño espacio que nos recibe es llamado Genkan. Es un escalón bajo del mismo nivel del exterior donde se dejan los zapatos, para luego posteriormente calzarse con zapatillas hogareñas o simplemente andar descalzos en el resto de la casa. En Japón es una práctica muy común el considerar la casa un espacio sagrado y pulcro, y ensuciarlo con los zapatos es una grave descortesía. El Genkan suele tener en su adyacencia un clóset o estante pequeño para los zapatos de toda la familia.

Genkan de gran tamaño. Se considera el área más sucia de la casa y los habitantes tienden a no pisarlo descalzos o en medias, sólo con sus zapatos cuando van a salir.
Las casas suelen tienen un espacio designado como i-má (居間) que es equivalente a una sala de estar o de usos múltiples. En una casa grande ésta varía en tamaño dada la ocasión mediante paneles corredizos de madera para poder satisfacer la actividad que se decida realizar en ella, una simple comida en familia o una reunión de varias personas.
En un apartamento pequeño, suele ser el único espacio amplio y se utiliza para distintos usos dependiendo del momento del día; en las mañanas y tardes tiene mesa y sillas para sentarse a comer y recibir invitados, y en la noche puede funcionar como habitación. En los espacios muy reducidos, se mezcla la sala de estar con el comedor e incluso con la habitación, pero esto suele ocurrir en apartamentos de estudiantes o solteros.
También podemos encontrar en varios hogares un altar dedicado a los familiares fallecidos, pueden ser un mueble de gran tamaño con inciensos, amuletos de la suerte e incluso un pequeño nivel para ofrecer alimentos o bebidas. Aunque también pueden ser más sencillos y modernos, como una fotografía del fallecido en una pequeña mesa con inciensos.

Altares tradicionales para honrar a los fallecidos; familiares y amigos muy cercanos. Uno con su propio mueble, y otro simple.
El área del baño tiene el inodoro, lavamanos y tina separados en diferentes ambientes. El Ofuro, o tina, suele ser un espacio amplio con vestidor, área con una ducha para asearse y una tina donde el habitante de la casa toma un baño largo. El aseo para un japonés es una actividad que lleva su tiempo, y a veces puede darse como una actividad en conjunto con otros habitantes del hogar. En un apartamento suele ser un baño como los occidentales; con las tres piezas de sanitario en un mismo espacio.
Estilo
Los japoneses se caracterizan por su practicidad. No suelen tener decoraciones extravagantes o adornos de gran tamaño. Tienen justo lo que necesitan, en el lugar donde se almacena o utiliza más seguido.
Los espacios se separan mediante paneles corredizos y removibles de madera y papel, proveen al espacio de una flexibilidad absoluta en cuanto a tamaño. Además de no estar restringidos como una puerta tradicional en cuanto a la abertura del arco, cosa que agradecen los habitantes de espacios pequeños. Son livianos y permiten el paso de luz natural hacia las habitaciones, aunque si son internos pueden ser paneles completos con ilustraciones, funcionando también como decoración al espacio que se crea dentro.

Panel corredizo tradicional, también llamado Shoji. Puede tener gran variedad de estilos y decorados, incluso sustituyendo el papel por vidrio para las áreas que dan al exterior.
El mobiliario japonés, al soler cambiarse dependiendo del momento del día, es compacto y fácil de almacenar. Las mesas tienen patas cortas y se utilizan cojines como sillas. Hay tendencias semi-occidentales donde podemos ver sillas con respaldar, pero sin patas para poder sentarse de la manera tradicional japonesa.
Todas las imágenes que hemos visto nos dan una clara imagen de un hogar japonés. Ellos no tienen tiempo para adornos temporales, son austeros y estrictos en su minimalismo, detalle que no pasa desapercibido para un occidental acostumbrado a decorar su vivienda de maneras muy variadas; maneras que incluso cambian dependiendo del momento del año.
La madera predomina en la estructura y muebles, al igual que el color blanco en los paneles y paredes, para ayudar a que los espacios se sientan más amplios. Independientemente de si es una casa tradicional o un apartamento, siempre tendremos la flexibilidad de hacer la actividad que querramos, sin dejar de lado la belleza minimalista que nos brinda el estilo japonés mediante sus materiales nobles y la pulcritud con la que tratan sus habitaciones.