La alacena se entiende como el sitio donde almacenamos alimentos o vajilla. Se puede encontrar en la cocina o en el comedor, sitios donde se cocina o consume alimentos. Mas podemos ver la alacena como mueble, o como una pequeña habitación adyacente a la cocina.
Como espacio
La alacena como área cerrada adyacente a la cocina era la manera tradicional de guardar la comida. En ella se almacenaban los granos, harinas y productos que duraban un poco más tiempo que vegetales o frutas. Un espacio amplio, seco y oscuro para ayudar a conservar los alimentos.
Solían ser más grandes que un clóset. Lo suficientemente grandes para colocar en ellas sacos de granos y grandes reservas de alimentos conservados en lata o frascos de vidrio.
Tienen estantes con algunas gavetas y normalmente una pequeña escalera o escalón para poder acceder a su espacio más alto, si era necesario.
El material predilecto para su entrada y estructura es la madera. Aunque se dio también el uso del vidrio si tenía una ventana en el mismo espacio, o en la puerta, para evitar tener que abrir y entrar y ver qué había dentro. Al momento de hacer las compras, es muy útil pues no se pierde tiempo revisando.

Espacio de alacena moderno con líneas rectas y colores blancos.
En la actualidad el simple hecho de tener espacio de alacena da pie a poder decorarla o amueblarla con estantes que imiten el estilo antiguo. De esta manera recordamos el pasado y se convierte en un espacio agradable y con cierta personalidad a nuestro gusto.
Una alacena que ya tenga estantes rectos y modernos, se puede decorar de igual forma con cestas y frascos de vidrio de diseños de los años 40 o 60. Así como útiles de cocina de la misma época, como una balanza, por ejemplo.
Como mueble
También le llamamos alacena a ese mueble alto de varios estantes para guardar cubertería y alimentos. En el comedor, estas alacenas deben combinar en color, material y forma con la mesa y sillas del mismo espacio. Se decora con velas, flores o con la vajilla exhibida en sus aparadores de vidrio transparente.
En la cocina no se usa mucho para exhibir los platos que más nos gusten sino para mantener secos y bien guardados los alimentos. Suelen tener a la altura de una mesa un pequeño espacio de trabajo, para medir cantidades y volver a guardar frascos o latas.
Pero también los hay sin separaciones de altura y funcionan únicamente como muebles para almacenar. Los hay de muchos tamaños y formas, de madera, hierro, puertas de vidrio o de mimbre.
Decorando las alacenas
Un cuarto de alacena puede diseñarse de manera moderna para aprovechar todos los espacios y usar materiales ligeros.
En estos ejemplos vemos tres alacenas de distintos tamaños. La primera tiene tamaño de clóset y puerta corrediza (para no estorbar en la cocina), donde se guardan además de los alimentos algunos electrodomésticos pequeños. El uso de las cestas con mimbre dan un buen toque a la alacena.
La siguiente puede funcionar como ejemplo a alacena moderna. Si no queremos dar ese aire, podemos sustituir las cajas de madera lisa por unas cestas más tradicionales hechas a mano, tanto para lo que ya está en cajas como lo que está suelto, por ejemplo las latas o frascos pequeños de vidrio. Así como ordenar lo que está en cajas (que pueden ser harinas o cereales) en frascos de vidrio grandes. Así sabremos de qué cantidad disponemos con sólo verlo. Lo mismo podemos hacerlo con los dulces y galletas.
La última alacena se puede retocar con útiles de cocina antiguos, por ejemplo una balanza o mezcladora de los años 50. Así como la sustitución de bolsas y cajas de comida por frascos de vidrio.
Una alacena de mueble puede estar pintada de manera que parezca muy vieja, pero lo demás debería estar pintado de manera parecida para que combine.
La alacena es parte importante y tradicional de la cocina o comedor. Será siempre buena idea considerar si tener una en casa por la comodidad de guardar los alimentos secos en un sitio lo suficientemente espacioso y con facilidades de acceder a éstos para luego usarlos en la cocina. Podemos ver muchos más ejemplos, pero este vistazo general nos puede inspirar bastante.
Lo más importante es que lo combinemos y decoremos de acuerdo a nuestro gusto. El mejor resultado será el que nos sea más útil y agradable.